24 horas corriendo/caminando/descansando/alimentándose/confraternizando con otros corredores. Imagínense lo que es estar en carrera a pie, durante 24 horas, la cantidad de sensaciones y sentimientos que pueden pasar por la mente del corredor y los diferentes estados que el cuerpo y la mente pueden pasar. Claudia experimentó todo eso y disfrutó, pero también sufrió mucho para cumplir su sueño de recibirse plenamente de ultramaratonista, haciendo nada menos que en su debut en 24 hs, 125,585 kms.
La acompañaron dos grandes amigas que conoció gracias a esta gran familia de Amigos y Corredores, Isabel Vignone y Alejandra Silveira, dos grandes rojas, que no la corrieron, pero estuvieron más de 24 horas "viviendo" a la intemperie en un día muy frío, lo cual tampoco es ninguna "changa". Un número muy importante de rojos,concurrieron a la pista en distintos momentos de las 24 horas, como voluntarios para colaborar con organización como el Pirata da Rua, Elena y Dinorah y para acompañar, apoyar y alentar a Claudia, casi todos registrados en las fotos.
Esperamos el race report de Claudia, de Isa, de Alejandra, yo mismo tengo mil anécdotas y cosas para contar (por eso ya estoy proponiendo próximo encuentro rojo el viernes), aprendí mucho de un mundo totalmente diferente que es el de los ultramaratonistas y particularmente de las carreras largas por tiempo. Los ultras que tienen sin duda un concepto distinto del correr, ni mejor ni peor, en el que se puede parar, conversar, comer, ir al baño, descansar y hasta dormir, sin que eso represente abandonar ni necesariamente comprometer la chance competitiva, pudiendo ser hasta una estrategia o planificación realizada. La jornada fue una especie de camping ultramaratónica, con gran confraternidad y respeto, más allá de imponderables como el corte de luz de la medianoche y sus efectos en el registro de la empresas encargada del control de vueltas y tiempos.
El agradecimiento y reconocimiento de Los Rojos a todos los organizadores de AUDU: Amparo Bauter, Héctor Yeritano, Washington Sauda y todos los integrantes de AUDU por la oportunidad que brindaron a la roja Claudia y a un montón de ultras experimentados y debutantes (dentro de este rubro casi todos uruguayos), de concretar su sueño a través de esta carrera. Personalmente les agradezco el reconocimiento con cuadro/medalla/camiseta que me hicieron por la modesta colaboración de mi parte, que no representa nada al lado de monumental trabajo y desafío que uds. emprendieron, durante meses de preparación y finalmente pasando casi 3 días sin dormir, que se materializó en el logro y la visión de uds, del primer 24 horas (y 6 horas) en Uruguay y en la pista. Hasta algunos como Amparo, corriendo 2 horas en el medio, acompañando en el debut de Laura Paipo (atleta no vidente) en la especialidad de las 6 horas, que también acompañó la olimpista y roja virtual Alejandra Pizani, y el monumental Washington Sauda, que hizo algo que para muchos sería imposible: corrió las 24 horas, a la vez que se encargaba de detalles de la organización, además animando a todos con su alegría (y su cornetita o pequeña vuvuzela!), pero hubo varios de los integrantes de AUDU, que aportar mucho a la organización, y no dejaron de correrla. Héctor, gran ultra y de los pioneros en esto en Uruguay, no pudo correr pero estuvo en todos los detalles no solo las 24, sino más de 48 horas entre el antes y el después, después de meses de trabajo para el proyecto.
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